Razones para escoger diamantes de laboratorio

Entre las otras piedras preciosas, los diamantes son de las más atesoradas no solo porque son encantadores, sino que también son duraderos. Son bastante caros y por ese motivo muchos eligen diamantes creados en laboratorio como medio de ahorrar de dinero.

Si te gustaría comprar un diamante, deberías conocer los diamantes de laboratorio, cómo se fabrican y porqué son preferidos por encima de los diamantes extraídos de minas.

¿Qué es un diamante de laboratorio?

Los diamantes de laboratorio son diamantes fabricados por científicos en un laboratorio. Durante el proceso de producción, se emplearon tecnologías modernas para recrear las mismas condiciones con las que se forman diamantes naturalmente. El resultado es un diamante de fabricación humana que es exactamente igual a un diamante natural².

En la mayoría de los casos, los diamantes de laboratorio se comparan con diamantes simulados, pero son totalmente distintos. Los diamantes simulados son piedras que tienen la apariencia de un diamante pero que no contienen carbón, como la moissanita y la circonia cúbica. Esto sencillamente quiere decir que, aunque se parecen, no tienen las mismas propiedades. Los componentes químicos y físicos de los diamantes de laboratorio son los mismos que en los diamantes naturales. Sus propiedades son exactamente las mismas.

¿Cómo se elabora?

Los geólogos opinan que los diamantes extraídos de minas tan comunes se formaron en las profundidades del manto terrestre hace más de 542 millones de años. Antes de que se puedan formar diamantes, necesitan altas temperaturas y una presión extrema y esta clase de condiciones solo puede producirse de forma natural a 90 millas por debajo de la superficie de la tierra. En escasas ocasiones en fuentes profundas erupciones volcánicas traen diamantes a la superficie de la Tierra.

Así que, para fabricar diamantes de laboratorio, los científicos representan estas condiciones exactas y y se hace uso de dos métodos para fabricar diamantes artificialmente.

El primer método es mediante alta presión y temperatura alta. Este es un proceso en el cual los científicos colocan una semilla de diamante de un diamante natural en carbón. Entonces se somete a una alta presión y elevadas temperaturas utilizando o una prensa de cinta, una prensa cúbica o una prensa de esfera partida. La prensa permite que la semilla se desarrolle hasta conseguir el tamaño normal de un diamante.

El segundo método se llama deposición de vapor químico. En este proceso, el científico coloca el diamante en una cámara a una temperatura de 1500 ° F. Posteriormente, la cámara se ha llenado de gas metano y otro gas con carbón en abundancia. El átomo de carbón se adhiere a la semilla, se cristaliza y el resultado es un diamante².

Ventajas de los diamantes de laboratorio por encima de los diamantes naturales

En los últimos tiempos, los diamantes de laboratorio han ganado en popularidad, de hecho, la mayoría de la gente preferiría tener estos en lugar de los naturales³. A continuación, se enumeran los motivos:

➢ Es imposible diferenciar diamantes de laboratorio y diamantes naturales. La única diferencia es la manera como se forman, cuando llegan a la joyería nadie podría diferenciarlos. Los diamantes de laboratorio son igual de bonitos y resistentes que los diamantes naturales.

➢ Los diamantes de laboratorio están exentos de conflicto⁴. Los diamantes extraídos de forma natural tienen antecedentes de haber estado vinculados a violencia y conflicto. Según las Naciones Unidas, los diamantes de guerra se refieren a cualquier diamante extraído de una zona sometida al control de un grupo que va en contra de un gobierno y las políticas de ese país. La mayoría de las veces, los diamantes de guerra se venden para respaldar la financiación de acciones violentas contra gobiernos. Derivando por tanto en el maltrato y la explotación de mineros y trabajadores. Las Naciones Unidas propició en el 2003 el Proceso Kimberley con el objetivo de comprobar si diamantes exportados están libres de violencia. La valoración de expertos es que el número de diamantes de Guerra en la industria habría disminuido de un 15 % a menos de 1 % en el comercio mundial de diamantes. Aunque, estas estadísticas son difíciles de confirmar. Existe una posibilidad que un montón de diamantes en el mercado se extrajeran en condiciones ilegales, pero como no se ajustan a la descripción de diamantes de guerra de las Naciones Unidas, se consideran exentos de conflicto. Aun así, la compra de un diamante de laboratorio es tranquilizante porque no hay necesidad de preocuparse por una fabricación no ética. Tienes la garantía de su origen y eso significa que tu dinero no se utilizará para respaldar ninguna práctica corrupta o violenta.

➢ Los diamantes de laboratorio son ecológicos. La mayoría de los diamantes en el mundo se extraen de minas en países que no disponen de leyes ambientales. La minería de diamantes puede tener un tremendo efecto en el entorno, especialmente cuando las empresas mineras tienen como objetivo extraer tantos diamantes como puedan de la forma más rápida posible. La energía utilizada para fabricar diamantes de laboratorio no es nada en comparación con la empleada en extracción de diamantes naturales. Esto es simplemente porque el proceso entero tiene lugar en un laboratorio y los diamantes de fabricación humana no afectan al entorno de igual que los diamantes naturales.

➢ Los diamantes de laboratorio no son tan caros como los diamantes naturales. En el año 2016, el coste medio para la compra de un anillo de compromiso era de unos 6000 $ o más. Recientemente ha tenido lugar un notable aumento de los precios y la posibilidad de que los diamantes naturales se encarezcan es elevada. La compra de un diamante de laboratorio le ayudará a reducir el coste obteniendo el mismo producto. Redactores de CreditDonkey realizaron una comparación de coste de diamantes de laboratorio y diamantes naturales. Si quisieras gastar un par de miles de dólares en un anillo de diamantes, elegir un diamante de laboratorio te podría ayudar a ahorrar más de 1000 $.

➢ Los diamantes de laboratorio son para siempre. Con el paso de los años, la popularidad de los diamantes de laboratorio está aumentando. A medida que va evolucionando la tecnología, está resultando más fácil para los científicos fabricar diamantes que se parezcan mucho a las gemas extraídas. Si lo que quieres es conseguir diamantes, la menor opción es elegir los de fabricación humana. No solo ahorrarás dinero, también protegerás al medio ambiente y tu comportamiento será ético al comprar una piedra preciosa bonita y sostenible.

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